Velar por la seguridad del usuario por encima de los intereses comerciales. Utilizar las herramientas adecuadas y la tecnología actual para garantizar la calidad en las intervenciones. Salvaguardar la seguridad en el trabajo de nuestros técnicos, evitando las intervenciones en condiciones peligrosas o insalubres.
Fomentar el ahorro de energías no renovables, como el gas natural, aconsejando un uso racional de los sistemas de control y regulación, para colaborar a que podamos seguir disponiendo de estos combustibles por muchos años, contribuyendo también a la economía familiar.
Evitar cualquier comentario que pueda menoscabar el prestigio de otro profesional de la instalación o reparación del producto. Intentar buscar la solución a los posibles problemas directamente con el profesional en cuestión.